Unicaja Banco ha publicado el tercer número de su informe ‘Previsiones Económicas de Cantabria’, que, como en ediciones anteriores, ha sido elaborado por Analistas Económicos de Andalucía.
El informe de la sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco se divide en tres apartados: 1) Entorno económico, 2) Evolución reciente de la economía cántabra y 3) Previsiones económicas de Cantabria 2023 y 2024.
En el primero de los apartados se describe el contexto económico internacional y nacional. En el segundo, se realiza un análisis de coyuntura de la economía cántabra, prestando especial atención a la evolución de sus principales magnitudes, de acuerdo con la estructura productiva de la región. Finalmente, en el último apartado se incluyen las previsiones sobre la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) y el empleo para la Comunidad cántabra para 2023 y 2024.
Entorno económico mundial y nacional
Aun cuando para 2023 se confirma la desaceleración de la actividad a escala global con respecto al ejercicio anterior y la persistencia de las tensiones inflacionistas, durante los últimos meses se ha producido una mejora de las perspectivas, lo que ha llevado a los principales organismos económicos internacionales a revisar sus proyecciones. Así, la OCDE prevé que en 2023 la economía mundial registre un crecimiento del 2,6%. Por otro lado, a pesar de la moderación de los precios de la energía, la dinámica seguida por los precios apunta a que la inflación subyacente se mantendrá elevada.
En el caso concreto de la economía española, en el conjunto de 2022 creció más de lo previsto, a una tasa del 5,5%, con mayor intensidad en la primera parte del año, con un buen comportamiento del mercado de trabajo. Los últimos datos disponibles, relativos al primer trimestre de 2023 recogen una variación intertrimestral del PIB del 0,5%, con el sector exterior actuando como soporte. En términos interanuales, el PIB ha registrado un aumento del 3,8%, destacando el buen comportamiento de las exportaciones, especialmente de los servicios turísticos, y la aportación de los sectores de la construcción y los servicios, por el lado de la oferta.
Las últimas proyecciones publicadas del Banco de España señalan un aumento del PIB del 1,6% para 2023, en tanto que en 2024 se estima un crecimiento superior al 2%.
Evolución reciente de la economía cántabra
Según los datos de la Contabilidad Regional Trimestral de Cantabria, publicados por el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), en el conjunto de 2022, la economía cántabra registró un crecimiento del 4,0%, 1,6 puntos porcentuales (p.p.) por debajo del correspondiente a 2021. La expansión de la actividad descansó, principalmente, en el sector servicios y en la construcción, con tasas de crecimiento superiores al 4%.
Por su parte, en el primer trimestre de 2023, el PIB cántabro creció con respecto al trimestre anterior en un 0,4% (0,5% en España), según las estimaciones de AIReF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal). En términos interanuales, el crecimiento ha sido del 2,3% (3,8% en España).
En lo que respecta al mercado de trabajo, de acuerdo con la información disponible, el empleo ha continuado creciendo. La afiliación a la Seguridad Social registró un crecimiento interanual del 1,6% en el mes de abril.
Previsiones económicas de Cantabria para 2023 y 2024
Las previsiones de la sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco apuntan a que, en el conjunto de 2023, el PIB de Cantabria podría crecer un 0,9% (1,4% en España), recuperando en la segunda mitad del ejercicio el nivel previo a la pandemia. Asimismo, se prevé que, en el promedio del año, el número de ocupados (según cifras de la Encuesta de Población Activa) aumente un 0,2%. Por su parte, el número de parados se reduciría un 2,1%, situándose la tasa de paro en el 9,2% en el promedio del año.
En lo que respecta a 2024, las primeras estimaciones de Analistas Económicos de Andalucía sitúan la tasa de crecimiento de la economía cántabra en el 1,9%, y en el 1,0% para el número de ocupados, con una tasa de paro del 8,6% en el promedio del año.
No obstante, estas previsiones están sujetas a una elevada incertidumbre y fuentes de riesgo, que pueden orientarlas a la baja en términos de la actividad económica y al alza con respecto a la inflación. Entre los principales riesgos se encuentran las tensiones geopolíticas de la guerra en Ucrania, el tensionamiento de las condiciones financieras por encima de lo esperado y la persistencia de la dinámica de la subida de precios.
Descarga aquí los gráficos asociados al informe y aquí el informe al completo.